" De acuerdo con la tradición constitucional de nuestro país, en ausencia de prueba en contrario, debemos presumir que la regulación de los contenidos y de la expresión está más cerca de interferir el libre intercambio de las ideas que de promoverlo. El interés de potenciar la libertad de expresión en una sociedad democrática está por encima de los beneficios teóricos e indemostrables de la censura".

Con esta contundente afirmación, el Tribunal Supremo de los Estados Unidos declaró ayer que los apartados relativos a la censura de los contenidos considerados "indecentes" de la Communications Decency Act eran inconstitucionales, y que la libertad de expresión en Internet merecía el mayor nivel de protección que la Constitución puede ofrecer.

La impugnación inicial de la CDA corrió a cargo una coalición formada por diversas organizaciones como Apple, Microsoft, the American Civil Liberties Union, the Electronic
Privacy Information Center, Barnes & Noble, EFF, etc.

El Tribunal Supremo confirmó las decisiones previas del Tribunal Federal de Filadelfia y de Nueva York, rechazando la controvertida enmienda de la Telecommunications Reform Act de 1996, por constituir una violación de la Primera Enmienda. La opinión del Tribunal establece de forma firme que la Constitución garantiza la libertad de expresión y la libertad de prensa en Internet.

"Existen medios técnicos de bajo coste, que junto a las ya existentes leyes anti-obscenidad ofrecen soluciones menos intrusivas y más eficientes para la protección de la infancia en el mundo digital."

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